El Reino Unido ha anunciado la implementación de una nueva tasa de entrada, que afectará tanto a los turistas como a los conductores de transporte internacional. A partir de 2025, todos los viajeros, incluidos los conductores de camiones, autobuses y otros vehículos comerciales que deseen ingresar al país, deberán pagar una tarifa obligatoria. Esta medida es parte del Electronic Travel Authorisation (ETA), un sistema similar al ESTA de Estados Unidos.

¿Qué implica esta tasa para los conductores?

Para los conductores de transporte internacional, esta tasa representará un nuevo coste operativo. Los transportistas que circulen entre la Unión Europea y el Reino Unido, quienes ya enfrentan barreras burocráticas y demoras desde el Brexit, ahora deberán sumar el coste de la ETA. Aunque el precio exacto aún no ha sido confirmado, se estima que rondará los 10-15 libras por persona.


Aunque el precio exacto aún no ha sido confirmado, se estima que rondará los 12 euros por persona.


¿Quién está obligado a pagarla?

La tasa será aplicable a cualquier viajero que no requiera visa para entrar al Reino Unido, lo que incluye a la mayoría de los ciudadanos de la Unión Europea, así como a conductores de transporte por carretera que realicen viajes de carga o pasajeros a territorio británico. Tanto transportistas de mercancías como conductores de autobuses deberán obtener este permiso antes de entrar al país.

¿Cómo afectará al sector del transporte?

La introducción de esta tasa podría aumentar los costes de transporte para empresas que dependen del flujo regular de mercancías hacia y desde el Reino Unido. Sumado a los desafíos actuales del comercio post-Brexit, como los controles aduaneros y los tiempos de espera prolongados en los puertos, la nueva tasa podría ser otro factor que ralentice las operaciones y encarezca los servicios.

Algunas asociaciones de transporte ya han expresado su preocupación, solicitando que se tenga en cuenta la naturaleza esencial del transporte internacional y se implementen exenciones o tasas reducidas para los conductores de camiones y otros vehículos comerciales. Argumentan que este tipo de medidas podría perjudicar la competitividad del sector y dificultar aún más el comercio con el Reino Unido.

¿Cómo obtener el ETA?

El ETA deberá solicitarse en línea, y será necesario que los conductores internacionales lo tramiten antes de su viaje. Al igual que los turistas, deberán proporcionar información personal y detalles del viaje a través del sistema electrónico. Se recomienda a los transportistas que planifiquen con antelación y soliciten el permiso con tiempo suficiente para evitar retrasos.

Impacto en la logística y el comercio

Con la implementación de esta tasa, las empresas de transporte por carretera que operan entre Europa y el Reino Unido podrían verse obligadas a revisar sus costes y optimizar las rutas para minimizar el impacto económico. Además, es probable que esta medida ralentice aún más el ya tenso flujo de mercancías a través de los principales puntos de entrada, como Dover y Calais.

En resumen, la nueva tasa de entrada al Reino Unido para conductores de transporte internacional añade una carga más a las empresas del sector, que ya enfrentan desafíos desde el Brexit. Será fundamental que los transportistas se adapten rápidamente a esta nueva normativa para evitar interrupciones en el servicio y gestionar los nuevos costes que conlleva.